(Terminología acorde con la Nueva Gramática de la RAE)
En primer lugar, debemos recordar que además de la terminología tradicional usada, se incorporan algunos conceptos más actuales: la raíz como segmento morfológico que aporta el significado léxico, la base como forma de la que se parte en un proceso morfológico, el afijo como segmento morfológico que agrega informaciones de diverso tipo (los pospuestos o sufijos, los antepuestos o prefijos, los interfijos que se agregan a la raíz y la separan del sufijo, y los afijos discontinuos que se insertan a la vez delante y detrás de una base), la desinencia como conjunto de segmentos flexivos (género y número para las categorías nominales; vocal temática, tiempo, aspecto, modo, persona y número para el verbo) y alomorfos como variantes de los morfemas.
Las clases de palabras son artículo, sustantivo, adjetivo, pronombre, verbo, adverbio, preposición, conjunción e interjección. Los determinantes englobarían artículo, numeral, posesivo, cuantificador y demostrativo.
Hablaremos de morfología flexiva y morfología léxica. La primera se refiere a las variaciones de las palabras que implican cambios gramaticales con consecuencias en las relaciones sintácticas.
Las terminaciones de los sustantivos de género inherente (-a en cas-a, por ejemplo) no se analizan como marcas de género, sino de palabra, ya que se pueden perder en la formación de derivados.
En la morfología del verbo se distinguen dos elemento constitutivos: la raíz y las desinencias (vocal temática; tiempo, aspecto y modo; número y persona). En la flexión verbal se acepta la existencia de segmentos nulos (Ø).
La morfología léxica estudia la estructura de las palabras y las pautas que permiten construirlas o derivarlas de otras. Se divide en derivación y composición.
Las palabras derivadas se forman a partir de otras y constan de una raíz y un afijo. La raíz aporta el significado léxico y los afijos agregan información de diverso tipo.
En la derivación hay tres procesos: prefijación, sufijación y parasíntesis.
El término parasíntesis se refiere al procedimiento de formación de palabras que participa de la derivación y la composición y se da en verbos de base nominal o adjetival formados por la adición simultánea de un prefijo y un sufijo.
Dentro de esta morfología léxica deberemos incluir las bases compositivas cultas, la derivación y la composición.
En el caso de las bases compositivas cultas estamos ante un tema complicado, ya que no existe una regla evolutiva común a todas ellas. Las bases cultas pueden tomarse como base o como prefijo (por ejemplo en hidroterapia o en fotofobia).
En la derivación tendremos en cuenta la vocal temática en sustantivos y adjetivos deverbales (derivan de verbos), los derivados participiales, los adverbios en –mente, alomorfos de los sufijos derivativos, interfijos y apreciativos:
- La vocal temática en sustantivos y adjetivos deverbales se integra junto con la raíz y forma la base de la derivación. Después se segmentará la base, indicando la presencia de la vocal temática. Los cambios en la base se analizarán como alomorfos, con la excepción de la marca de la palabra.
- Derivados participiales. Hay muchos adjetivos cuya forma coincide con la de los participios. En esos casos la vocal temática se unirá a la raíz, formando la base, sobre la que se añadirá el sufijo derivativo. Después se segmentará la base (así, por ejemplo, “malhumorado” será mal+humor>malhumorar (verbo) /malhumorado (verbo)> malhumorado (adjetivo), con las bases mal+humor dando lugar a la base “malhumor”, “ar” sufijo de formación de verbos, con la vocal temática “a” y el morfema de infinitivo “r”, base “malhumora-“ y el morfema de género “o”, y se clasificará como adjetivo, masculino, singular y palabra derivada).
- Respecto a los adverbios en –mente, este sufijo se integra en los morfemas derivativos. El morfema de género femenino formará parte de la base.
- Alomorfos de los sufijos derivativos (es importante distinguirlos de los interfijos). Un ejemplo lo encontraríamos en “abrazadera”, donde “-dera” es sufijo de formación de sustantivos y “-a” es marca de femenino (alomorfo de -ero/a).
- Los interfijos son los segmentos mediales, ya sean flexivos o derivativos. Se excluye de este análisis la vocal de enlace en palabras compuestas (“-i-“, “-o-“) que se agrega a la primera base.
- Los apreciativos son morfemas derivativos. En palabras como “chiquitico” o “bicharraco” se encuentran interfijos más sufijos apreciativos (“chiqu-it-ico”, “bich-arr-aco”).
La composición es el procedimiento morfológico por el que se integran dos o más bases en una palabra, formando así una palabra compuesta.
La Nueva Gramática distingue tres tipos de compuestos: propios (como “agridulce”), sintagmáticos (por ejemplo, “cabeza rapada”) y sintácticos (como “ojo de buey”), aunque estos últimos se consideran locuciones nominales.
Las combinaciones de adverbios, preposiciones y conjunciones (“abajo”, “aunque” o “porque”) no se consideran compuestos por no reconocerse en ellos la independencia gramatical de los segmentos. Las formas “conmigo”, “contigo” y “consigo” se consideran grupos preposicionales.
Se consideran compuestos los relativos inespecíficos como “cualquiera” o “dondequiera”. También se consideran compuestos las palabras formadas mediante una base y un numeral, como “ciempiés” o “milhojas”.
En otro orden de cosas, debemos recordar las siglas y acrónimos. Las siglas están formadas por las letras iniciales de varias palabras, como ONG, y suelen designar organizaciones o instituciones. Los acrónimos son siglas con estructura silábica normal que se integran en la lengua como sustantivos o como unidades léxicas formadas por la unión de varios segmentos de varias palabras (“Ancia” o “Mercasur”, por ejemplo).
Por último, hay que destacar para el análisis morfológico en esta prueba que el concepto de “parasíntesis” en la nueva Gramática se aplica exclusivamente a los verbos formados por afijos discontinuos. El procedimiento de formación de palabras que participa de la composición y la derivación pasa a ser un proceso de derivación a partir de una palabra compuesta previa.